Han sido numerosas al parecer las quejas de los usuarios que protestaban con este cambio, ya que lamentaban, por ejemplo, la pérdida de privacidad al comunicarse cualquier cambio en la foto del perfil a los demás contactos. También ha originado numerosas críticas la desaparición en el menú principal de la lista de contactos y favoritos de la aplicación, lo que dificultaba la tarea de iniciar una conversación.
La nueva función (WhatsApp Status) aparece como una pestaña más, junto con los chats y las llamadas, y permite al usuario grabar o fotografiar momentos de su día a día y decorarlos con los stickers o emoticonos de la herramienta. También podrá seleccionar quién quiere que vea su publicación y comprobar quién ha mirado sus publicaciones, de 24 horas de duración, al estilo de Snapchat o Instagram.
Pero, haciendo caso a las peticiones, WhatsApp restaurará los tradicionales estados de WhatsApp (que convivirán con los nuevos) en la próxima actualización de la aplicación, tanto para iOS como para Android.
Para evitar la confusión con los que imperan actualmente, los estados “antiguos” pasarán a llamarse “tagline” (en inglés), aunque por ahora se desconoce cuál será su traducción en castellano. Se apunta a que podrían denominarse “titulares” o “lema”, pero la compañía no ha confirmado la nueva denominación de momento.